vida personal y en su obra. Sus rostros, sus almas están
en muchos de los mejores cuadros del artista. Doce historias de
amor, a veces confusas, dulces, repetitivas, herméticas,
amargas, dramáticas. Doce historias de amor que
sustentaron su inspiración desde su vida bohemia de
Montmartre hasta su fructífera vejez.
sintetizar la difícil y compleja relación que
Picasso mantuvo con las mujeres: "Su pintura son sus mujeres
y sus mujeres son él. Tal vez las haya amado o tal vez
no… Pero no hay duda de que las deseó, le hicieron
entusiasmarse, expresar los sentimientos que le provocaban, y
finalmente, crear… Ellas, cada una de ellas, fueron su
arte, su referencia, su objeto de trabajo, el estímulo
necesario, aunque a veces la crueldad también formó
parte de esa simbiosis."