NOTA RESUMEN SOBRE EL LIBRO DE Peter Gøtzsche “Medicamentos
que matan y crimen organizado. Cómo la industria farmacéutica ha
corrompido el sistema de salud” Los libros del lince. Barcelona. 2014.
http://www.loslibrosdellince.com/
Juan Gérvas, médico general jubilado, Equipo CESCA, Madrid. jjgervas@gmail.com www.equipocesca.org @JuanGrvas
«Todos
los medicamentos producen daños; algunos producen beneficios. A veces
los beneficios son sólo monetarios, para los accionistas de las
industrias farmacéuticas. Y, como se demuestra en este libro, tales beneficios llegan a ser criminales».
En
este libro se analizan múltiples medicamentos que han provocado más
daños que beneficios, y en algunos casos miles de muertos. Son ejemplos
reales en los que los daños se han producido
«a sabiendas», como un crimen organizado. Es decir, existe
documentación con la que se demuestra que la industria farmacéutica
conocía el balance negativo del medicamento considerado y, sin embargo,
inició y persistió en su venta con tal de obtener beneficios monetarios,
a costa de la salud de los pacientes. Tal documentación salió a la luz
en los procesos judiciales en que se condenaron a las industrias a
multas e indemnizaciones de miles de millones de euros. Lo que es peor,
en muchos casos las industrias han repetido tal conducta pues al final
«salen las cuentas», y sus beneficios crecen sin parar pese a los
problemas judiciales y las muertes de pacientes.
El autor propone soluciones para evitar la continua repetición de los «errores mortales» a que
lleva un modelo basado en el lucro y en el control de las patentes.
Propone, literalmente, «una revolución» pues el cambio debería implicar a
toda la cadena de producción, evaluación, propaganda, autorización y
venta de medicamentos, y a todos los implicados (industriales,
científicos, investigadores, revistas, agencias de medicamentos,
políticos, gestores, periodistas, expertos, médicos y pacientes).
UN EJEMPLO TRATADO EN EL LIBRO. El caso del Vioxx y de Merck y de la FDA1
Para los dolores se emplean
medicamentos analgésicos del estilo de la aspirina y del ibuprofeno,
los llamados anti-inflamatorios no esteroideos (AINE). Son muy útiles
para dolores varios tipo artrosis, contusiones, gripe, dolor de muelas y
otros. Su mayor inconveniente es la erosión de la mucosa del estómago y
el vómito de sangre.
A
finales de los 90 del siglo pasado se desarrollaron unos nuevos
analgésicos con la idea de mejorar su efecto contra el dolor y al tiempo
disminuir sus problemas de erosión del estómago. Se denominaron «analgésicos de última generación» e incluso «superaspirinas».
Entre
esos medicamentos, el Vioxx (rofecoxib) de Merck. Se hicieron estudios,
como el VIGOR, que demostraban las ventajas del Vioxx y sus datos se
publicaron en las mejores revistas del mundo, como el New England Journal of Medicine.
La
FDA aprobó el Vioxx en 1999, con dudas sobre su beneficio global. Merck
hizo un publicidad agresiva de su nuevo analgésico. Por ejemplo,
encargó casi un millón del copias del artículo del New England del
estudio VIGOR y lo repartió a
todos los médicos en Estados Unidos. Al final, en apenas cinco años,
Merck logró que 25 millones de estadounidenses tomaran Vioxx.
El problema es que Vioxx doblaba el riesgo de infarto de miocardio, y que provocó 38.000 muertes por ello, sólo en Estados Unidos.
Al
revisar las publicaciones sobre Vioxx se descubrió que se habían
«maquillado» para ocultar los efectos adversos graves tipo infarto de
miocardio, que eran conocidos por Merck y los investigadores y
sospechados por las revistas científicas
y hasta por la FDA. Se habían publicado cientos de artículos
científicos favorables a Vioxx, la mayoría reiterativos y por autores
«inventados» (fantasmas, a sueldo de Merck). Incluso Merck creó una
falsa revista científica en la que publicar artículos complacientes con
Vioxx.
El
caso se resolvió con la retirada del medicamento en 2004, varios
juicios y una multa de 1.000 millones de dólares. Antes de los juicios,
pero ya con sospechas fundadas de fraude criminal, los responsables de
Merck mintieron sobre Vioxx a las revistas, a la FDA y hasta al Congreso de Estados Unidos.
1 La
FDA es la agencia del medicamento de Estados Unidos. Es decir, el
organismo oficial que autoriza la venta de medicamentos y determina sus
usos apropiados. También puede ordenar retirar un medicamento del
mercado, si juzga que sus daños superan a sus beneficios.
http://www.nogracias.eu/2014/08/27/medicamentos-que-matan-y-crimen-organizado-nota-para-ciudadanos/
https://www.researchgate.net/publication
/260251698_Medicamentos_que_matan_y_crimen_organizado