En el siglo XVI, el Papa Sixto V, prohibe la Astrología judiciaria, es decir, la Astrología predictiva que hace juicios.
La gente común de la época acudian al astrólogo y pedían cartas horarias, para saber cosas concretas, por ejemplo, si volvería el marido de la guerra, si su hijo iba a sanar, etc
Eran preguntas para las que no se necesitaba saber la hora natal, que por otro lado solo conocían las gentes con dinero y poder, o que tenían astrólogos personales.
Ésta útil herramienta, hoy permanece desconocida de la mayoría, por eso los astrólogos que hacemos Astrología tradicional la damos a conocer, y la ponemos en práctica.
Los resultados son espectaculares.
Citando a John Frawley :