La carta del retorno del Sol a su
posición natal o revolución solar es tal vez la más conocida y empleada
de las cartas denominadas cíclicas y esto es lógico, ya que el ciclo
anual marcado por el Sol, el astro más importante de nuestro sistema y,
por consiguiente, del horóscopo, es la medida de tiempo más idónea y
cómoda para una tarea de previsión de tendencias generales y de
acontecimientos, que es para lo que se suele emplear esta carta.
A pesar del interés generalizado, es
totalmente escasa la literatura, aún en otras lenguas, que trate sobre
el tema, no pudiéndose dejar de citar a Alexandre Volguine, quién desde
mediados de los años cincuenta, a través de numerosas reediciones y
traducciones de su libro, reintrodujo esta técnica, especialmente en el
área latina, señalando así la manera en que la mayoría de los astrólogos
actuales suelen servirse del tema solar.
Tal vez el libro de Volguine adolezca de
cierta falta de claridad en algunos puntos, como en los temas de
ejemplo, y esperamos que este nuevo tratado de Lluís Cot, quien ha
trabajado “la solar” durante años, facilite un poco más la tarea al
interesado, ya que para explicar la interpretación ha seguido los pasos
necesarios y precisos dentro del planteamiento moderno, tema que el
autor conoce con profusión.
Nos parece oportuno señalar esto, ya que
en la antigüedad, el tratamiento de la solar era mucho más exhaustivo y
al parecer competente en las previsiones, ya que los modernos, si bien
valoramos en el retorno que sea un fenómeno astronómicamente mesurable,
hemos quitado del medio otras claves no astronómicas usadas otrora, con
base mayormente en el ciclo anual, las cuales son un precioso
complemento para que esta carta dé más de sí; una prueba de la
consideración y laboriosidad de los antiguos la tenemos por ejemplo en
muchos aforismos que con acierto este libro incluye.
No por todo esto, el alcance, o lo que
cabe esperar de la solar, es limitado, claro está; de hecho, el método
de previsión global en Astrología no existe y es a través de varios
sistemas que la prognosis se hace más elocuente. Por lo que usualmente
puesto a actualizar los contenidos de una carta natal o a prognosticar,
el astrólogo hecha a mano, en principio, de alguna dirección para todo
lo que tenga que ver con el desarrollo psicofísico y ciclos de previsión
más largos, el tema anual y las sucesivas revoluciones lunares si se
trata de ubicar tendencias o hechos precisos, finalmente queda para las
lunaciones y los tránsitos planetarios el papel de desencadenantes de
las técnicas empleadas. Creo que tomada en esta forma y con cierta
práctica, la revolución solar es una carta que puede dar insospechadas
satisfacciones.
Ernesto Cordero
https://drive.google.com/file/d/0B1CFDs54xpQOdzFCVHNKQTJyYnc/view