En astrología horaria, y de hecho en todo juicio astrológico, menos, realmente,
es casi siempre más. Las cosas que aprendo rara vez se tratan de complejos
detalles arcanos, sino cosas tan obvias en su simplicidad que sencillamente las
pasé por alto. La concisión y la economía son el corazón de la astrología horaria.
Notarás también que muchos de los errores que identifiqué, provienen de
una reverencia excesiva a los escritos de nuestros ilustres antepasados. Debemos
relacionarnos con estas autoridades a través de un diálogo crítico, no con una
obediencia irreflexiva. Desafortunadamente, en el mundo de la astrología tradicional
es común pensar que citar a una autoridad concluye cualquier discusión.
Más a menudo, es un indicio de que quien hace la cita no comprende lo que
se está discutiendo. La única afirmación que puede citarse con seguridad es el
sabio consejo de Nicolás Culpeper de que mantengamos nuestros cerebros en la
cabeza, no en nuestros libros, ya que ése es el lugar que Dios dispuso para ellos.
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