Platón dejó escrito por boca de Sócrates que el origen del mal era la ignorancia.
La abuela Kihili Kuntur va en la misma línea, y escucharla me ha hecho comprender muchas cosas.
Cosas que ya " sabía ", pero de un modo latente.
Y es que la " ignorancia ", y mi contacto cotidiano con ella, ha modelado mi realidad y mi vida.
Por suerte siempre he sentido respeto y admiración por la gente que, humildemente, sabe.
Huyo despavorido ante santones y pedantes, pero antes he tenido que " lidiar " con unos cuantos, y algunos han jugado durante un tiempo con mi alma.
Al pueblo nos quieren ignorantes, mientras los más listos de la clase se reparten el botín.
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