Un ejercicio astrológico interesante es ver las cartas de los hijos para ver como te reciben, tu eres la misma persona, sin embargo la percepción que ellos tienen de ti, no es la misma.
Si eres madre, debes mirar donde está la Luna en la carta de tus hijos, y también mirar el regente de la casa X.
Si eres padre, entonces miras el Sol y también el regente de la casa IV.
Es interesante porque nuestros hijos son parte fundamental de nuestra enseñanza de vida y aunque nosotros seamos los adultos, siempre tenemos que buscar fórmulas para lidiar de la mejor manera en nuestra relación con ellos.
En mi caso por ejemplo, yo tengo una hija con el Sol en Escorpio y yo soy Leo, nuestros Soles están en cuadratura y cuando nos enfadamos la solución es complicada porque ambos somos tercos.
Yo, como persona adulta siempre tengo que resolver el conflicto porque es mi obligación como padre.
Eso redunda a la larga en una mejor sintonía entre ambos y en una profunda complicidad.
Os invito a que experimenteis con la idea.
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