El individuo vive un karma de experimentar la conciencia colectiva en si mismo. Siente el impacto del pensamiento mundial, y es consciente de cómo se relaciona éste con las ideas del mundo en todas las épocas. Al no expresar siempre lo que sabe, tiende a ver a los demás como parte de una totalidad más amplia y exclusiva antes que como una base en proporción constante uno a uno. En su vida personal, es mucho menos importante lo que hace que lo que piensa sobre lo que hace. La mayor parte del tiempo vive dentro de su conciencia, cribando la multitud de sentimientos que experimenta en su interior. El crecimiento espiritual posible con Plutón retrógrado sólo está limitado por la mente consciente del individuo. Puede mostrarse literalmente superior a la mayoría del karma de toda la raza si así lo decide. Curiosamente, si trata de evitar la elevación de su karma, sentirá de todos modos los karmas inferiores de cuantos le rodean. Así, si escoge elevarse a si mismo, empezará a vivir realmente la parábola de Jesús de "estar en este mundo pero no pertenecer a él". Para conseguirlo a la larga, atraviesa por retiros temporales durante la primera mitad de la vida, hasta que aprenda a ser impersonal con la intensidad del mundo que siente fuera de él, de modo que al final alcance el punto que ya no sentirá actuar en su interior. Este individuo con Plutón retrógrado piensa en los males de la sociedad como una razón personal para transformarse a si mismo. Sabe que no puede cambiar el mundo, no obstante, le gustaría hacerlo si eso fuera algo práctico o posible. Pero puede cambiar el mundo entero dentro de si mismo, acabando con los lazos de todo lo que le ata a cosas inferiores a su ser purificado. Éste es un proceso que supone varios años, y a veces muchas vidas para conseguirlo. En su más alta manifestación, representa la verdadera conciencia de Cristo de traer a este mundo la forma más pura de amor. En menor medida y con menos frecuencia, elimina continuamente de su vida todos los factores que impiden el progreso de su alma y la expresión de su espíritu. El individuo con Plutón retrógrado experimenta la lucha de la humanidad como un lucha personal consigo mismo. Personalmente, siente la necesidad de vencer en su interior todo lo que ha estado disminuyendo su conciencia de la sociedad en que vive. Así, reacciona enérgicamente ante la falta de honradez de otras personas hacia si mismas, considerándolo como una enfrenta personal a su propio progreso, que cree que debe hacer por el bien último de la civilización de la que él es parte importante. Debe aprender a alejarse un poco de los hábitos y de la forma de comportarse de los demás, cuyas vidas tienen poco que ver en realidad con su propia realidad interna.
Para quienes son capaces de responder a Plutón natal retrógrado, las fuerzas regenerativas que impulsan a una reforma total
de la propia conciencia estarán aún más profundamente enclavadas dentro
del inconsciente, y no podrán ser expresadas con facilidad. Al igual
que sucede con Urano y Neptuno retrógrados natales, Plutón retrógrado
deberá focalizar sus poderes transformativos en las condiciones que ya
han sido establecidas dentro del individuo en el pasado. Generalmente,
el individuo será más cauto psicológicamente que con Plutón directo. Se
resistirá inconscientemente a que sus rasgos negativos internos sean
escrutados tanto por su conciencia como por los demás. Al condenar a
esas energías y al no encontrar canales adecuados para su liberación,
ciertas tensiones profundamente perturbadoras pueden trastornar el
funcionamiento sano de la psique. Debido a que este Plutón es más
interno, el individuo puede suprimir el deseo a algún nivel. Fuerzas
reprimidas pueden crear presiones espantosas que se mantendrán
escondidas en el interior, hasta que se produzca una violenta erupción. A
veces, esos «despojos» de alta carga emocional pueden ser mejor
liberados a través de los estados de sueño profundo, experiencias
oníricas muy vivas, o diversas formas de conciencia alterada (a menudo
inducidas por estímulos químicos). El individuo estará menos inclinado a
buscar salidas externas para la liberación de esa energía. La
intensidad de la voluntad se enfatizará con la retrogradación, pero
rara vez se exhibirá exteriormente de forma directa. Es más factible que
primero sea demoledor con las estructuras internas con las que está en
guerra, y que inmediatamente después intente acabar con la estructura
social externa. La dificultad aparente en encontrar salidas adecuadas a
la poderosa energía plutoniana alentará el desarrollo de fobias poco
comunes, complejos emocionales destructivos, compulsiones mórbidas,
deseos fijos, y una amplia gama de perversiones. Cuando Plutón
retrógrado hace aspectos muy difíciles, la hostilidad puede dirigirse
hacia el interior de forma implacable, o puede manifestarse como una
agresión incontrolable hacia la sociedad. Un Plutón igualmente
afligido pero directo focalizará esa agresividad con más estrategia.
Pero dado que los factores inconscientes parecen tener en este caso más
influencia sobre su naturaleza, Plutón retrógrado indicará que el
individuo posee menos control sobre los elementos más oscuros de sí
mismo. Pero a la persona despierta, este Plutón le brinda la oportunidad
de indagar profundamente en su interior para descubrir e investigar las
raíces causales de sus defectos kármicos. Le permitirá comprenderse en
profundidad, y poseer además una percepción increíble sobre el
funcionamiento del inconsciente. Será impulsado a explorar las
motivaciones psicológicas ocultas de sí mismo y de los demás, en mayor
medida que Plutón directo, que gasta demasiado tiempo en sus luchas por
el poder, puesto que la necesidad de dominio sobre los asuntos externos es
mucho más fuerte. Plutón retrógrado aumenta la resistencia psicológica,
probablemente debido a que este individuo debe volver a examinar partes
de su pasado que pueden ser muy amenazadoras y abrumadoras para el ego.
Sin ese aguante y esa resistencia interior, es factible que evitase
ahondar tanto en sí mismo. Aunque a menudo de manera inconsciente,
tendrá miedo de ser inundado por la parte sombría de sí mismo, y sólo
se sentirá más seguro cuando busque conocer activamente su naturaleza.
Plutón retrógrado es quizás aún más compulsivo en su intento por
descubrir los misterios fundamentales del ser. Como Plutón
permanece retrógrado más tiempo que la mayoría de los planetas, más
personas tendrán a este planeta que a ningún otro retrógrado en su carta
natal. Pero como Plutón representa cualidades del ser casi
ultrahumanas, muy alejadas de lo que la vida nos ha condicionado a ser, muy pocos
individuos serán capaces de manejar sus energías inescrutables de
manera comprensiva. Ya se encuentre retrógrado o directo, la influencia
directa de Plutón sobre la configuración consciente del individuo es
casi nula. Parece que la única conexión que la mayoría tiene con Plutón
es a través del efecto colectivo de los desarrollos masivos, y en
especial los de naturaleza revolucionaria. Pero, los carismáticos y
poderosos líderes que capitanean tales movimientos sociales, captarán la
energía de Plutón a nivel personal. Sin embargo para la gran masa
humana, Plutón actúa como una influencia sólo
impersonal. Creo que el grupo de almas que encarnan juntas con Plutón
retrógrado estarán colectivamente preocupadas por retener su poder
personal, guiadas por la determinación férrea de ignorar los símbolos
externos de autoridad (mientras que quienes poseen Plutón directo se
sentirán más impulsados a unir fuerzas en un intento por abatir tal
presión autoritaria a través de la oposición activa). Las almas que
tienen a Plutón retrógrado tendrán menos deseos de fundirse con el todo
colectivo y expresarán rasgos más antisociales. En este grupo se
hallarán los seres socialmente más aislados, mientras que los rebeldes
agresivos y los descontentos sociales que intentan minar activamente el
Orden Establecido, estarán mayoritariamente en el grupo de Plutón
directo. Quizás el grupo de Plutón retrógrado está empeñado en la
revolución interior. Estos individuos pueden ser muy distantes,
inaccesibles, en el sentido de la intimidad profunda, y más difíciles
de conocer, quizá debido a su acentuada inclinación al secreto. Viven
erupciones psicológicas y purgas internas completas apenas visibles en
la superficie. Pero los pocos miembros relevantes de este grupo podrán
ayudar a la humanidad a dar grandes pasos en la comprensión de los
vastos e ilimitados poderes del espíritu, a través del trabajo
con el inconsciente personal. Estos son los valientes pioneros
dispuestos a explorar los dominios externos del espacio interior, así
como los reinos internos del espacio exterior. Se interesan
especialmente por la fuente del poder que genera los enormes
cambios colectivos en el mundo, se sienten impulsados a buscar la clave
que les permitirá dominar este poder primigenio. (Pablo Picasso, Marie Curie, Alan Watts, Dylan Thomas, Aleister Crowley, Howard Hughes, Richard Nixon, Timothy Leary).
PROGRESADO: Cuando Plutón se vuelve retrógrado por
progresión, permanece en esa fase durante el resto de la encarnación
(160 años progresados). Los asuntos externos de la Casa que ocupa Plutón
natal se volverán más complejos y multifacéticos con el paso del
tiempo. Pero también pueden llevar al individuo a conectar con sus
poderes regenerativos y produce una mayor renovación personal cuando es
manejado con inteligencia. Un renacimiento psicológico, una
transmutación de deseos, o una transformación de valores, serán más
necesarios ahora que nunca, si quiere beneficiarse de los asuntos de
esta Casa. Deberá mirar en su interior con mayor intensidad y con un
sentido agudo de la realidad, a fin de comprender dónde y cómo deberá
rehabilitarse. Ello exige que se enfrente a esas fuerzas oscuras que en
el pasado se hicieron cargo de sus emociones. Quizás las condiciones no
eran adecuadas para evolucionar, al comienzo de su vida, y cumplir con
sus necesidades, por lo tanto no tuvo que confrontar a Plutón
retrógrado hasta este momento señalado (su influencia fue mantenida en
suspenso hasta que las condiciones estuviesen maduras). Tal vez
debería vivir experiencias más adecuadas a un Plutón directo antes de
sufrir esta transición. ¿Quién lo sabe con seguridad? Kármicamente, el
individuo será reintroducido a obsesiones poderosas o deseos intensos,
expresados en vidas pasadas. Ahora será nuevamente puesto a prueba en
esta vida, para ver si es capaz de relacionarse con sus potentes fuerzas
internas y pasiones, sin dejar que lo consuman o desgasten. Debe estar
alerta ante el surgimiento de impulsos por el poder, instintos
manipulativos, deseos compulsivos o irresistibles, especialmente de
índole antisocial, o impulsos drásticos por cortar completamente las
ataduras en las relaciones. Puede darle claves acerca de la parte más
tétrica de su ser en relación con las vidas pasadas. Ahora deberá
examinar con más cuidado los contenidos de su ser no regenerado. Sin
embargo, este período progresado puede señalar también una etapa en la
que el individuo es capaz de sintonizar con un nivel de percepción
interna, en que reconoce y reclama los recursos potentes del alma de un
pasado que incrementó significativamente su crecimiento evolutivo.
Podrá volver a conectar con esas dimensiones de sí mismo en las que fue
capaz de alcanzar un grado de maestría que podrían ayudarlo ahora a
limpiar todos los residuos personales y la negatividad racial kármica
desde dentro. Martín Schulman cree que Plutón retrógrado permite al
individuo experimentar «la conciencia de la masa dentro de sí mismo»
Opina que el individuo «experimenta la lucha de la humanidad como una
confrontación personal en su interior. Siente personalmente la necesidad
de superar en sí mismo todo aquello que disminuyó la conciencia de la
sociedad en que vive» Estoy totalmente de acuerdo con la percepción de
Schulman. Cuando Plutón se pone directo por
progresión, sus efectos tardan en manifestarse. Como los otros planetas
de la Octava Superior, Plutón dirigirá ahora más su atención hacia las
necesidades generales de la sociedad, en vez de hacia el
autodesarrollo solitario. Idealmente, el individuo estará preparado
para un compromiso social profundo, ya que su período recapitulativo ha
concluido. Será capaz de ofrecer al mundo los beneficios de los poderes
que ha desarrollado durante su período de autoexamen. No quiere decir,
sin embargo, que lo hará. Pero las oportunidades para impactar
socialmente al mundo se volverán evidentes. En la mayoría de los casos,
el individuo se volverá más activo dentro de su propio contexto y
aceptará las situaciones como son sin cuestionamientos ni análisis
indebidos. Sentirá menos necesidad de ahondar en sí mismo para
comprender su existencia, lo que será un agradable alivio para algunos.
Afortunadamente, el campo de batalla ya no se halla en el interior.
Ahora podrá encontrar salidas externas que le permitan airear sus
fuerzas interiores concentradas de una forma que lo gratifique
psicológicamente. Su atención se irá condicionando lentamente a
observar los procesos mundanos en vez de los estrictamente subjetivos,
descubrirá que posee una perspectiva más amplia de los asuntos sociales,
compartida por muy pocos. Es capaz de visualizar el drama humano desde
un punto de vista más amplio. Podrá también comprender mejor la
motivación de las masas, incluso en sus expresiones radicales, ya que
las ha experimentado en sí mismo. Cuánto más dominio haya adquirido
durante la fase retrógrada sobre las facetas más oscuras de su sombra,
más capaz será de tolerar la expresión de sombras similares a nivel
colectivo, ya que no las teme más. Y debido a que es más consciente de
su naturaleza, puede ayudar a convertirlas en poderes renovados que
contribuyan al crecimiento de la sociedad.
TRANSITO: La
fase retrógrada de Plutón en tránsito dura unos 160 días, y ocurre una
vez al año. Aunque su influencia se concentra especialmente sobre la
Casa que transita en estos momentos, se mueve tan lentamente que incluso
su influencia sobre esta Casa podrá parecernos a la mayoría de nosotros
poco nítida. Es preciso recordar que Plutón representa esa parte de
nuestra psique que es a menudo difícil de examinar a fondo. Nos indica
allí dónde estamos en la total oscuridad, sobre la naturaleza de los
desarrollos internos que atravesamos, ya que trabaja en los niveles más
profundos y subterráneos del ser. Pero su acción es inexorable y, a
veces, hasta despiadada en el cumplimiento de sus metas últimas. Cuando
Plutón está retrógrado, detiene el desarrollo externo de la Casa que
transita (aunque con la mayor sutileza), y en vez de ello nos fuerza a
focalizarnos allí donde hemos fracasado en regenerarnos
convenientemente durante los tránsitos previos del planeta. Rara vez
somos conscientes de este hecho cuando sucede, y cuanto más perceptivos
seamos de lo que nos ocurre, menos nos sacará de quicio este tránsito.
Lo único que parecemos comprender es que ciertos asuntos difíciles del
pasado, que fueron en su momento psicológicamente
arduos de confrontar, son otra vez puestos en nuestro camino para
volver a examinarlos (aun cuando las situaciones parezcan radicalmente
diferentes). A Plutón sólo le preocupa confrontarnos con la esencia de
lo que no hemos transformado en una expresión más elevada. No está tan
interesado en la forma en que nos trae esa percepción, al menos en
términos de cómo amenaza nuestro ser centrado en el ego. Supongo que
Plutón piensa que ése es nuestro problema,
no el suyo. Plutón cuenta con muchos recursos que usará para impactar
profundamente, y a veces de manera perturbadora, nuestra naturaleza,
según las enraizadas vulnerabilidades que hemos permitido que corran
desenfrenadas. Como Plutón es un planeta de motivaciones extremas, se
inclina a atacar esas partes más radicales de nosotros, y sólo nos
fuerza a transformar lo que necesita rehabilitación. En estos momentos,
Plutón retrógrado continua azuzándonos de una forma que puede parecernos
incomprensible, e incluso persecutoria, cuando se considera desde
nuestra experiencia mundana cotidiana. Algunos de nosotros trataremos
de oscurecer nuestras intenciones interiores en este sector de la vida y
permanecer inocentes sobre la naturaleza de nuestras acciones, en
cambio Plutón mantendrá su aguda mirada sobre las motivaciones reales y
básicas detrás de tales acciones. Desde un punto de vista práctico,
Plutón retrógrado en tránsito sugiere que el individuo tiene una
oportunidad, según la Casa implicada, para desandar sus pasos y
descubrir las fuentes latentes de poder (recursos ocultos) previamente
ignorados, que ahora pueden ayudarlo a avanzar sus objetivos en este
sector, una vez que hayan sido desenterradas. Dependerá especialmente
del grado de autodisciplina, control emocional, y también de los
apetitos (la sensualidad puede ser un problema cuando Plutón es muy
activo en la carta). Plutón en esta fase puede incluso forzarnos a
revaluar nuestros derechos y valores en relación a los ajenos. Plutón
nos lleva a concentrarnos más profundamente en la naturaleza básica de
las actividades de esta Casa en vez de dispersar al azar nuestros
intereses según los dictados de nuestra voluntad, si lo hacemos nos
veremos obligados a una autoconfrontación tensa con las partes sin
resolver de nosotros mismos, que nos sentimos impotentes para superar.
Como Saturno, Plutón nos muestra la realidad de nuestras limitaciones,
aunque desde un punto de vista más psicológico. Para el individuo
consciente de sí mismo, puede ser una etapa maravillosa para aplicar
sus percepciones más penetrantes sobre los elementos descarriados del
ser interno que necesitan una especie de renacimiento. Se trata de esas
partes de la psique que se resisten de forma crónica a cambiar
constructivamente su nivel emocional. Usualmente, donde exista la mayor
resistencia interna a alterar nuestro esquema interior, es allí donde
Plutón realiza su trabajo más efectivo. A Plutón retrógrado en tránsito
le atrae explorar nuestras debilidades ocultas en el sector en que
focaliza sus habilidades escudriñadoras. En su fase retrógrada, todavía
está más atento a los sutiles detalles que normalmente se pasan por
alto. Ya que su período transitante retrógrado dura tanto, el individuo
es gradualmente condicionado a ahondar en sí mismo para crecer en este
sector, dado que las situaciones normales por sí solas no le proveerán
de este potencial. Necesitará retirarse psicológicamente si desea ser
más consciente de los recursos que le llegan desde sus profundidades
internas. Quienes no son autoconscientes tendrán menos posibilidades
de buscar los potenciales sutiles que se presentan en estos momentos. Se
limitan a reaccionar al sorprendente giro de los sucesos que ocurrirán
sin comprender nada, y sintiéndose víctimas de las circunstancias. Pero
incluso este sentimiento indica una cierta sintonización con Plutón.
Para la mayoría de personas, el tránsito retrógrado de Plutón por una
Casa pasa casi desapercibido.
http://astrologiapsicologiaholistica.blogspot.com.es/search/label/6%29%20Los%20planetas%20Retr%C3%B3grados%20Natales.Progresados%20y%20en%20Tr%C3%A1nsitos.%20Las%20Dimensiones%20M%C3%BAltiples%20y%20la%20proyecci%C3%B3n%20del%20pensamiento.
No hay comentarios:
Publicar un comentario